Preparar a los niños y jóvenes para un futuro que todavía no conocemos consiste en uno de los retos más desafiantes y apasionantes de la educación. En particular, la transformación social que las tecnologías digitales han provocado en todos los ámbitos ha traído consigo importantes cambios y desafíos en la naturaleza y las formas en las cuales interactuamos con nosotros mismos, con las demás personas y con el entorno. La cantidad ilimitada de información a la que estamos expuestos y la extensión de posibilidades que nos ofrece el desarrollo tecnológico actualmente nos obligan a repensar la forma en que educamos. Esto es doblemente urgente en los contextos más desfavorecidos, ya que es allí donde la brecha digital amenaza con dejar aún más excluidos a niños, niñas y adolescentes que ven sus oportunidades limitadas por motivos vinculados a su lugar de origen.
Por este motivo, desde sus inicios María de Guadalupe buscó integrar las nuevas tecnologías en sus aulas, con el objetivo de que actúen como potenciadoras de la enseñanza y el aprendizaje. A lo largo del tiempo, se ha ido desarrollando en nuestra institución una propuesta de educación digital muy potente, la cual le ofrece a nuestros estudiantes desde primer grado y durante doce años, con un promedio de dos horas semanales, la posibilidad de apropiarse de las tecnologías digitales.
En dicha propuesta son ejes destacados, la programación, la robótica y el pensamiento computacional.
- La programación como capacidad de diseñar y escribir una secuencia de instrucciones en un lenguaje que pueda ser entendido por una computadora.
- El pensamiento computacional como una habilidad clave para la resolución de problemas, la cual se vale de la organización lógica y el análisis de datos.
- La robótica, que ha tomado gran relevancia en los últimos años, con la emergencia de los procesos de automatización en distintos ámbitos sociales. Por esta razón, se lo propone no solo como recurso didáctico para el aprendizaje de saberes tradicionales, sino principalmente como objeto de estudio en sí mismo, particularmente en sus aspectos ligados a la programación.
Para que esta propuesta educativa sea posible, se ha trabajado intensamente sobre la producción de contenidos y recursos didácticos, la formación docente y el diseño de progresiones de aprendizaje. Todo esto, no hubiera sido posible sin la apuesta por la educación de distintas fundaciones, empresas y colaboradores que le han permitido a nuestros estudiantes contar con la infraestructura, dispositivos tecnológicos, y programas educativos necesarios para el desarrollo de nuestra propuesta de educación digital:
Fundación Hermanos Agustín y Enrique Rocca, Ediciones Logos, Digital House, Lenovo, Roche, Edenor, Emsetec, Fundación ITAÚ, Fundación Telefónica, TICMAS, Fundación Kipp, Altitude, Operation Canasta.
El reto frente al futuro incierto es grande, pero siendo conscientes de él podemos dar pasos certeros para preparar a los jóvenes con herramientas apropiadas, abrir su curiosidad y generarles preguntas, fomentar el “aprender a aprender”, para que estén preparados para lo viene.